Retomo esta sección algo olvidada últimamente. Y es que desde que “el pingüino” nos pilló a muchos hace unos meses, ha sido difícil recuperarse. Sobre todo en casos como el mío, en el que este blog no es uno de mis proyectos principales, sino más bien, un conejillo de indias en esto del posicionamiento web.
Para no extenderme mucho, os resumo cómo me afectó la actualización del algoritmo de Google, conocida como Penguin.
Esta actualización fue lanzada oficialmente el 24 de abril de este año. Notaréis en la gráfica que las visitas comienzan a descender un par de días antes, coincidiendo con el fin de semana, que es cuando este blog suele tener una bajada importante de visitas.
Descubriendo el problema
Tras subir este drástico descenso de visitas, comencé a investigar a qué se debió mi “penalización”. Por la red encontraréis muchas opiniones y pequeñas “notas” de Mat Cutts hablando sobre el tema. Finalmente, creo que estos fueron los tres factores que incidieron directamente en la caída:
Repetición de anchors texts (textos ancla)
Como ya vimos en el capítulo sobre Link Building, el anchor text era una de las principales formas de decirle a Google qué iba a encontrar en la URL de destino. Es decir, una forma sencilla de luchar por esa palabra clave, usándola como texto ancla.
Google entiende que usar siempre el mismo texto no es natural. Y es lógico. Si estamos posicionando la palabra “coches Granada”, lo lógico es que nos enlacen de formas diferentes: “compra coches en Granada”, “Consulta nuestra web”, “Pincha aquí para ver nuestros coches”, y no siempre con «coches Granada».
Yo, como muchos otros, me basé en usar casi siempre el mismo anchor text. Mal, aunque por aquel entonces no se veía tan malo. Lección aprendida.
Enlaces no naturales
Malo, malo, malo. Hay que tener mucho cuidado con la compra de paquetes de enlaces o el intercambio a lo bestia. Yo compré un par de paquetes de estos para probar. Tenía que ver si eso funciona o no.
Tuve mala suerte, ya que los compré justo un mes antes de que llegase el pingüino, con lo que Google me pilló. Los paquetes eran de unos 300 enlaces, con dos palabras claves y dos URLs distintas.
Mejora de los demás
Lógicamente, esto también me afecto. Muchos otros sitios no habían cometido estos errores, así que me adelantaron rápidamente en las SERPs.
Conclusiones
Mucho ojo con los enlaces no naturales
Google ha dejado claro que cada vez le da más importancia a la “naturalidad” de la web, es decir, a que nos enlacen por la calidad de nuestros textos y páginas, no por pagar, intercambiar o comprar reseñas (entre otras cosas).
Uso de anchor texts variados
Lo natural a la hora de que nos enlacen es que cada sitio que lo haga use su propio lenguaje o forma de enlazar, y no que todos nos enlacen con la palabra clave que estamos posicionando. Así que lo lógico es varias el texto ancla, jugando con la semántica, el long-tail y la “naturalidad” (pincha aquí, haz clic para ver esto, etc.)
Dependencia de pocas palabras claves
Es un fallo muy común en blogs pequeñitos como este, que posicionan un contenido determinado, ya sea a propósito o porque un día escribieron un par de artículos muy buenos sobre el tema.
Es un error esforzarse solo en un par de palabras clave, aunque estas nos reporten muchas visitas. Luego llega Google, te manda a la cola en las SERPs para esa palabra clave y a ver cómo recuperamos visitas.
El contenido sigue siendo el rey
Es el dicho que toda persona dedicada al posicionamiento web sabe. Lo más importante es un contenido de calidad, original y abundante, ya que es lo único que come el robot explorador de Google. El uso de sinónimos, diferentes expresiones para la palabra clave y demás elementos del lenguaje normal nos ayudarán a posicionar un término concreto.
Y ahora, a volver al trabajo. Espero poder comenzar el capítulo 11 hablando de una mejora.